La gerente de la Fundació Foment del Turisme, Irene Moya, tras una de las reuniones mantenidas en Pekín, con responsables de la China Tourism Academy.

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La gerente de la Fundació Foment de Turisme, Irene Moya, se encuentra desde el pasado lunes en China explorando las opciones de Menorca de abrirse un hueco en un mercado lejano y desconocido, pero con un inmenso potencial. Se trata de un viaje de prospección para el que se ha programado 16 reuniones con grandes turoperadores, agencias de viajes físicas y on line, medios de comunicación e instituciones turísticas del gigante asiático. La intención es medir el interés de los turistas chinos en la Isla y evaluar la idoneidad de llevar a cabo acciones promocionales y de establecer colaboraciones con mayoristas y compañías que permitan abrir un flujo de llegadas indirectas, desde otros destinos españoles como Barcelona, Madrid y Palma.

Para ese viaje de prospección comercial, el ente promocional del Consell, desde donde destacan que Menorca es la única isla balear que no había explorado el mercado chino, ha contratado a la empresa Long Strategic Consultancy, afincada en Mallorca y experta en el mercado chino. El objetivo es desembarcar en China (concretamente en Shangai y Pekín) con una hoja de ruta que permita captar si existe interés (en los últimos años ya se ha detectado de forma incipiente) y volver con una estrategia de penetración en un mercado que en los últimos años ha experimentado un gran crecimiento en otros destinos nacionales.

El director insular de Promoción Turística, Isaac Olives, subrayaba ayer que «tenemos muy claro que este mercado no será ninguna panacea, como se auguraba para el mercado ruso, pero tenemos la responsabilidad, ahora que tenemos las competencias de Promoción Turística, de buscar nuevos mercados para diversificar». Todo ello, aclara «como un añadido a la promoción que ya hacemos en los mercados más cercanos y tradicionales».

La estrategia preliminar de la fundación es poner el foco en la calidad del destino y en su sostenibilidad, destacando productos vinculados a la naturaleza, la cultura, la gastronomía, etc.. Las primeras impresiones están siendo positivas y al parecer existe un especial interés en el país asiático por el hecho de que el destino en su conjunto sea Reserva de Biosfera y candidata a Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

La idea del ente promocional del Consell, desde el que existe un total convencimiento de la necesidad de realizar este análisis de riesgos de una eventual promoción en China, es que, en un momento en que la industria turística es cada vez más cambiante e inestable, se hace necesario diversificar al máximo los mercados para fortalecer el destino y hacerlo más resistente a esos cambios.