Reunión extraordinaria del patronato de la Fudació Foment del Turisme, celebrada este jueves | Josep Bagur Gomila

TW
2

La reunión extraordinaria del patronato de la Fundació Foment del Turisme celebrada este martes presencialmente en la sede del Consell levantó las primeras ampollas entre el sector privado y el equipo de gobierno del Consell, con Susana Mora al frente. Dos puntos del orden del día fueron los que motivaron el rechazo de la patronal, los dos únicos para los que se requería votación. El que más controversia generó y que salió adelante con el único apoyo de los consellers del gobierno insular, fue la aprobación del proceso de licitación del alquiler de un nuevo local para el ente promocional del Consell con una partida de 20.000 euros que inicialmente iba a afrontar el Consell, pero que finalmente correrá a cargo de las cuentas de la fundación turística.

Las patronales turísticas no se oponen a la ya histórica necesidad de buscar un nuevo emplazamiento para los trabajadores de la fundación, pero consideran que no es el momento. En ese sentido, desde la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome) y desde la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Menorca (PIME) proponen que se deje para más adelante, mientras Mora defiende que las condiciones en que trabajan los empleados del ente son «insalubres» y que no se pueden aplicar las medidas de distanciamiento social. Por su parte las patronales arguyen que hay que analizar la nueva realidad abierta por el sistema de teletrabajo, más aún cuando el Gobierno está preparando una orden para promoverlo. También exponen que lamentablemente la disponibilidad de locales irá a más y el precio a menos conforme vaya avanzado la crisis.

Noticias relacionadas

Otro de los puntos que generó conflicto entre el sector privado y el público fue la decisión de ampliar un diez por ciento la partida de patrocinios de eventos que generen un retorno turístico. El Consell esgrime que necesita ampliar esos fondos para poder ayudar a las empresas organizadoras en el sobrecoste que supone la modificación de calendarios, así como apoyar económica ente esos eventos, como la carrera Epic Camí de Cavalls, que tuvieron que cancelar la prueba ‘in extremis’ por la crisis sanitaria cuando ya habían hecho el desembolso. Además el Consell cambiará las bases para eliminar el requisito estacional e incluir nuevos supuestos tras la crisis.

Desde la Ashome, que votó en contra junto a CAEB y Aviba, consideran en primer lugar que estas decisiones deberían venir precedidas por una modificación de los presupuestos de la fundación y además entienden que en estos momentos habría que dar más apoyo a los eventos que ya están consolidados y después evaluar las necesidades de ampliar partidas. Pime y las patronales turísticas asociadas votaron a favor, aunque ven peligroso animar a los organizadores a lanzar eventos sin saber si podrán cumplir con los requisitos.