Imagen de una terraza de un bar en Maó.

TW
13

La economía balear se frenó en seco por el impacto del coronavirus desde la segunda quincena de marzo, lo que se tradujo en una contracción interanual del Valor Añadido Bruto (VAB) no agrario del 4,5 % en el primer trimestre del año, según cálculos de la CAEB.

El contador de crecimiento de Menorca ha encontrado sus peores aliados en la industria, según se desprende de la evolución de la afiliación del sector (-4,1%) y más concretamente en el segmento manufacturero menorquín (-4,4%).

En el cálculo por islas, Mallorca, con un 4,4 % de caída del VAB no agrario, es la isla con menor contracción, mientras que Menorca, con un 4,7 %, y las Pitiusas, con un 4,8 %, superan el descenso medio de la economía del archipiélago.

La Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB) ha hecho público este miércoles su informe del primer cuarto de 2020, en el que se recoge "una caída sin precedentes" del principal sector económico de las islas, los servicios, que redujeron su actividad en un 4,5 % respecto al primer trimestre del año pasado.

Con este arranque del año, que empeorará cuando se analicen los datos del segundo trimestre, la patronal evita hacer una previsión para el conjunto de 2020, aunque da por hecha una recesión que insta a mitigar en términos de empleo y supervivencia de las empresas manteniendo los ERTE para el sector turístico hasta que haya vacuna contra el virus.

«Balears afronta una campaña turística inédita, completamente atípica y llena de incertidumbres", ha dicho en un comunicado la presidenta de la CAEB, Carmen Planas, que pide a administraciones y empresas a "realizar un ejercicio de gobernanza integral" para mitigar el impacto a corto plazo y "sentar las bases de la reorientación del destino ante los cambios permanentes que se anticipan».

A su juicio, es preciso mantener los ERTE en las actuales condiciones mientras no exista una vacuna contra el coronavirus para que las empresas "no se asfixien" y se vean abocadas a despedir trabajadores o cesar en su actividad.

Además de la caída de los servicios, completamente condicionada por la restricción de la movilidad interna y externa (33 % de descenso en la afluencia turística y del 39 % en las pernoctaciones hoteleras), también se ha producido una significativa reducción de la actividad del resto de sectores.

Noticias relacionadas

La industria se ha contraído en un 3,2 % respecto al primer trimestre de 2019y la construcción ha caído por encima del resto de sectores, un 5,8 %, a pesar de que acabó el año pasado con niveles de crecimiento superiores a la industria y los servicios.

CAEB espera que el "escenario de recesión" abierto por la crisis de la COVID-19 al finalizar el primer trimestres se agrave en el segundo, como anticipan datos como el incremento interanual del paro un 62 % en abril y un 92 % en mayo.

CONSUMO E INVERSIÓN

Desde el punto de vista de la demanda, la COVID-19 ha desplazado el patrón de familias hacia las compras de alimentos y bienes de primera necesidad, al tiempo que el deterioro de las expectativas asociadas al repunte número de parados (4,7%) y de la inflación general (0,7%) y la percibida (0,2% ) ha retrasado las compras de los bienes duraderos y reducido el gasto conspicuo.

De hecho, el agregado de consumo ha sufrido durante el primer trimestre una contracción del 5,2%, en línea con el retroceso observado tanto en las compras de vehículos (-63,6%) o establecimiento de comercio minorista (-3,3%).

La inversión, por su parte, ha anotado una contracción del marcador de crecimiento del 6,1%, en línea con el deterioro de la confianza empresarial, que se ha visto lastrada el primer trimestre hasta registrar el valor más bajo de la serie histórica (-34,7%).

Así, lo corrobora la negativa evolución del número de empresas afiliadas (-2,6%) y de nueva creación (-15,2%) o, en lo relativo a la inversión en construcción, el descenso montante económico de los proyectos de visados (-17%), independientemente de la categoría (-22%, obra nueva; -4,7%, reforma; -5,4% ampliación).