Macarena Molina denuncia la indefensión en la que se encuentra para que su marido pueda regresar a Menorca | Gemma Andreu

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La decisión del Gobierno español de prohibir la entrada en avión de ciudadanos procedentes del Reino Unido para frenar la expansión de la nueva cepa del coronavirus detectada en ese país, ha separado a una familia residente en Menorca.

La esposa, Macarena Molina de la Fuente, ha denunciado la indefensión en la que se halla porque su marido británico, que mantiene la residencia en Londres por motivos laborales, no puede regresar a la Isla desde el 22 de diciembre cuando entró en vigor esta prohibición. Solo se permite hacerlo a los españoles que vienen de Gran Bretaña o bien a los residentes británicos en nuestro país.

Macarena Molina de la Fuente, la mujer, con un hijo menor, de 7 años de edad y una hija de 15, viajó a Londres en Navidad para reunirse con su marido una vez más. Toda la familia debía regresar el 5 de enero a Menorca, pero la prohibición impidió al esposo subirse al avión. Como quiera que la restricción se ha prorrogado hasta el 16 de febrero, la mujer pide una solución «que nadie me da», dado que con toda seguridad la prohibición se mantendrá más tiempo.

Madrileña, afincada en Menorca desde hace 18 años, aunque no tiene más familiares en la Isla, Macarena explica que la prohibición no puede separar a una familia con un menor de edad. Por ello se pregunta: «¿quién protege a mi hijo si a mí me sucede algo, dado que soy trabajadora sanitaria en primera línea, y su padre no puede venir, como hace regularmente?». Sostiene que la prohibición tiene fundamento y no la cuestiona, «pero tiene que haber excepciones, como es mi caso» y el de otras muchas parejas que se han quedado en la misma situación». No entiende, además, por qué tampoco se permite la entrada si el pasajero presenta una PCR negativa, como sí se permite a los británicos residentes, más aún teniendo aquí a su familia.

El marido posee el Número de Identificación de Extranjeros pero no la tarjeta verde que le permitiría residir y trabajar en España, y que ahora precisa tras la aplicación del brexit que ha dejado a Gran Bretaña fuera de la Unión Europea, si quiere residir en este país. Sin embargo, como sus estancias en España no superan los 90 días, puede seguir viajando de un país a otro para compaginar su vida laboral y familiar, pero la nueva cepa de la covid-19 se lo impide.

Dirección Insular

Macarena Molina se ha dirigido a la Dirección Insular de la Administración General del Estado, en Maó, donde su titular, Isabel López, la atendió. La mujer presentó el libro de familia que acredita su estado matrimonial y su certificado laboral, pero la directora insular, tras consultar el caso con la Delegación del Gobierno en Balears, «me respondió que no había solución».

Insiste en el peligro que corre dada su ocupación laboral «por lo que me siento sola y desamparada por si sucede algo y mi marido sigue sin poder venir a reunirse con nosotros». El problema, asegura, es común al de otros matrimonios de la Isla que se han visto separados por este mismo motivo, «sin que el gobierno lo tenga en cuenta y las administraciones se laven las manos».