Un camión descarga mercancías en un supermercado del centro de Maó. | Gemma Andreu

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Ha habido más turistas que nunca en un mes de junio y, por tanto, que entre más mercancía de consumo en la Isla parece una relación lógica. Sin embargo, el incremento de producto general que está llegando en lo que va de año se halla bastante por encima del aumento del flujo turístico.

Lluís Moll, gerente de Mascaró Morera, la principal empresa menorquina de logística, sitúa el incremento entre un 30 y un 35 por ciento más que en 2019, el periodo de referencia. El porcentaje lo circunscribe a alimentación y material de consumo personal, que son también los que tienen prioridad en la cadena de transporte.

Se basa en la «línea de carga convencional, pero el material de construcción, por ejemplo, también aumenta. En conjunto, el transporte de mercancías está creciendo una barbaridad», afirma desde los datos de la gestión que maneja diariamente.

La gran diferencia ha comenzado en junio, que tuvo un incremento de pasajeros aéreos del 6,4 por ciento respecto al 19. El pasaje marítimo en el puerto de Ciutadella creció a su vez en ese    periodo un 20,2 por ciento. En consonancia con esos datos y plazo se ha producido el tirón de la demanda.

Colapso

Esa lógica cuenta con el antecedente registrado en marzo, abril y mayo, en los preparativos de la temporada sobre todo. Fue el periodo de mayor incremento de la actividad para el transporte general, según pone de relieve Joaquín Bisbal, el presidente de Astrame, la patronal menorquina que agrupa a estas empresas.

En junio y lo que llevamos de julio «hay también un aumento respecto a los años buenos de actividad, pero no tanto como los del arranque de la temporada, el volumen de ahora es importante pero digamos que se ha normalizado», precisa.

Su valoración atiende al transporte habitual, que es «mercancía de consumo, la demanda viene de las empresas, no solo de las vinculadas al mundo turístico, y el aumento es general», agrega.

Las mercancías entran mayormente por el puerto de Ciutadella, en torno a un 60 por ciento de las mismas a través de Baleària. En 2019 fueron desembarcadas 377.652 toneladas, de las que 129.356 corresponden a alimentación. Las frutas, verduras y hortalizas supusieron un volumen    de unas 8.000 toneladas contando las que desembarcan también a través del puerto de Maó.

Ports de les Illes no realiza estadística semestral, por lo que no se puede reflejar todavía en datos concretos el aumento de mercancías que vienen observando los transportistas.

Sí aparece el número de camiones cargados que han entrado por el dique de Son Blanc y el dato es relevante. En el primer semestre de este año han entrado un 23 por ciento más que tres años atrás. Se ha pasado de los 6.625 de entonces a los 8.133 de ahora, una diferencia considerable. No se especifica el volumen concreto de la carga pero aporta una referencia de la tendencia al alza en las entradas.

El precio aumenta un 6,5 %

Los transportistas aplican desde enero un aumento del 6,5 por ciento    en las tarifas, de acuerdo con la inflación interanual. La escalada de precios energéticos en los primeros meses del año y el fuerte repunte de la inflación en los meses siguientes ha más que amortiguado esos precios, «solo en carburante estamos pagando un 43 por ciento más que el año pasado», advierte Bisbal.