¿Reserva de la Biosfera?, se pregunta un lector harto de acudir a las autoridades y ver restos de uralita tóxicos en el campo o junto a depósitos de basura en el término municipal de Sant Lluís, Es Castell y también en Maó, como los de la imagen, en Trebalúger

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Se hace pasar por un técnico de la compañía eléctrica Endesa para tratar de estafar a clientes acudiendo a su domicilio. Primero les hace una llamada advirtiéndoles que se ha detectado un incremento desmesurado en su factura, y que pasará al día siguiente para revisar el contador. «A mí me dijo que mi factura subía a 600 euros», explica un mujer de Maó, que recibió la llamada esta misma semana. «Me dijo que vendría a comprobarlo pero, cuando le pedí que me diera sus datos, ya se echó atrás y dijo que me volvería a llamar; evidentemente, no lo ha hecho».

Avisar a la Policía y nunca pagar. Gesa-Endesa recuerda que en ningún caso se debe abonar nada a nadie que diga ser técnico de la compañía, y a la mínima sospecha, ponerlo en conocimiento de la Policía. Se trata de un tipo de estafa recurrente que suele tener como víctimas personas de avanzada edad.

Desaparecida y encontrada. Las policías locales de la Isla recibieron el aviso de la Guardia Civil por la denuncia de una madre, asustada por la desaparición de su hija, de 14 años, el martes al mediodía. La adolescente, al parecer, cogió un enfado descomunal porque su madre le había retirado el móvil y no volvió a casa durante dos días hasta que la Guardia Civil confirmó su hallazgo.

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Sugrañes, blanca. Sorpresa y susto morrocotudo el que se llevó la alcaldesa de Alaior, Misericordia Sugrañes, cuando el miércoles entró en su despacho el capitán de la Guardia Civil, máxima autoridad del Cuerpo en la Isla, acompañado por otro agente con la orden judicial para revisar y llevarse documentación de 17 obras anteriores a su mandato. «¿Y ahora qué hemos hecho»?, se preguntó antes de respirar tranquila cuando leyó el contenido de la orden. La edil y sus más allegados mantuvieron el tipo y apenas nadie se enteró de la presencia de los agentes en el Ayuntamiento durante buena parte del día.

Uralita en el campo. Un vecino de Sant Lluís muestra su indignación por la presencia de restos de uralita en el campo, en varias parcelas de Sant Lluís, y en otra próxima al colegio La Salle Mahón. «Parece mentira que presumamos de reserva de la Biosfera y las autoridades permitan este material disperso que es tóxico y contaminante», explica, tras haberlo puesto en conocimiento de las autoridades sin que le hayan hecho caso.

18.000 euros para el coche patrulla de Es Migjorn. Es el presupuesto del ayuntamiento de Es Migjorn para que su Policía Local vuelva a tener un coche para patrullar, del que carece hace más de un mes tras averiarse definitivamente el Seat Altea que tenía. El consistorio se dirigió a cinco marcas para que presentaran una oferta, pero solo se presentó una, y lo hizo fuera de plazo. Ahora tramita la contratación directa de un vehículo todoterreno al tiempo que espera recibir una pick-up donada por el Consell Insular, procedente de Protección Civil. La irritante burocracia, sin embargo, hace que la policía de Es Migjorn continúe aún sin coche propio. Mientras tanto, cuando lo necesita, comparte el de la brigada de obras.

Denunciado por vaciar la piscina y anegar el camino vecinal. El propietario de un restaurante en Binisafúller, junto al complejo de apartamentos Sa Fua, en Sant Lluís ha sido denunciado por varios vecinos con los que mantiene una guerra fría por el suministro de agua que les cortó hace un mes, en los apartamentos adjuntos que se sirven de su pozo, por vaciar la piscina en el camino vecinal que quedó anegado por esta circunstancia.