Sólo unas cincuenta personas acudieron, el miércoles, a la concentración convocada por CCOO y UGT bajo el lema «Contener los precios, proteger el empleo, frenar el deterioro de nuestras condiciones de vida». Entre los asistentes, la presidenta del Consell y secretaria general del PSOE-Menorca, Susana Mora; y el alcalde de Maó, Héctor Pons.
Pobre respuesta a una movilización de ámbito nacional convocada por los dos sindicatos en las principales ciudades de España para protestar por la insoportable escalada de precios y el encarecimiento de productos y servicios que está asfixiando a las familias y las empresas. Los sindicatos tenían que haber protestado mucho antes, porque el incremento de precios, concretamente en la energía y el transporte, se viene arrastrando desde hace meses. Así lo admitió el secretario general de UGT-Menorca, Servando Pereira, al afirmar que «tendríamos que haber salido cuando subió el precio de la luz, porque la situación es de urgencia».
Las organizaciones sindicales, que evidenciaron su escasa capacidad de convocatoria, han de ser mucho más exigentes con el Gobierno PSOE-Podemos. Y reclamar medidas que ya no se pueden demorar ni un día más.
