TW
0

Estaba ya jubilado y era creyente. Así que cuando aquel joven que empezaba en el mundo de los negocios fue a pedirle consejo, influido seguramente por sus lecturas bíblicas, se lo quiso explicar por medio de una parábola. Esto fue lo que le dijo:

Un hombre, que había ahorrado bastante dinero, tenía dos hijos, y les propuso hacer algo con una parte de su capital, para sacar un mayor rendimiento. El mayor, que había estudiado economía, oyó que existían unos fondos que daban una rentabilidad muy alta, superior al 8%. Algunos de sus conocidos, gente de gran solvencia y renombre, habían depositado grandes cantidades en dichos fondos. Las expectativas eran muy elevadas. La reputación del producto y del depositario, estaban por las nubes. Decidió invertir para especular de manera inteligente, y dejando el tema a uno de sus gestores financieros, se desentendió por completo de los detalles de la operación. "Tantos multimillonarios no pueden estar equivocados", pensó. Y se fue de vacaciones.

El hijo menor, había cursado formación profesional (la especialidad de Administración y finanzas), y quiso asesorarse bien sobre el destino de su capital. Empezó a indagar sobre lo que la Bolsa podía ofrecerle y sobre las previsiones a medio plazo. Fue así como llegó a su conocimiento, que dos jovenzuelos atrevidos, que vivían en Estados Unidos, habían sacado al Mercado acciones de una empresa que acababan de crear. Se basaba en un buscador que iba a facilitar la vida de millones de personas, que necesitaban encontrar información en internet. Iban a poner orden en todo ese caos de datos, que no paraba de crecer de manera exponencial. Parecía muy utópico y algunos dijeron que se trataba de una de tantas fantasías juveniles y que ese par de desconocidos, se iban a estrellar muy pronto contra la realidad pura y dura. Pero recordó un viejo lema de su padre: "no inviertas sólo en lo que ves, sino en lo que te gustaría ver".
El primero, había depositado su dinero en lo que resultó ser un fraude de 50.000 millones de dólares. Un tal "Bernard Madoff" había construido una estafa piramidal que se vino abajo, de repente, y que se llevó al garete todo el dinero que la gente le había estado confiando durante años.

El valor de las acciones del segundo, se multiplicó por 7 en tres años. "Google" pasó a ser una de las empresas más potentes y valiosas del mundo. Y él se sentía orgulloso de haber participado de alguna manera, en ese bonito sueño. A partir de ese golpe de suerte, quiso continuar su formación, iniciando estudios universitarios.

Cuando el anciano dio por concluida la narración de la parábola, ambos quedaron un rato en silencio. Después, el joven le dio las gracias, y se alejó de allí, pensativo.