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Un político tiene que estar, entre otras cosas, bien servido de algunos principios irrenunciables. Unos reflejos que no le hagan llegar una semana tarde donde debe de estar horas después de que su presencia sea inexcusable. Pero sobre todo debe cuidarse mucho de no regalar "munición oral" a sus adversarios políticos, so pena de ser por eso "apedreado" con las descalificaciones que, a fin de cuentas, son la herramienta de la oposición.

¡Hombre señor Zapatero!, ¡no foti! ¿Qué urgencia tenía usted de irse, justo cuando viene su santidad el Papa, a Afganistán? Ha tenido usted seis años para ir a decirles a las tropas españolas lo que les dijo, justo cuando usted tenía que haber estado en Santiago de Compostela.

Aquí no se discute lo de ateos, laicos, católicos, apostólicos o romanos. Un presidente del gobierno, y usted lo es, tiene que tener "mucha cintura" y saber que tiene unas prioridades y que además, ejerciendo de político deberá de hacer cosas como las de estar presente cuando viene el Papa, incluso aunque no sea de su agrado, porque ¿sabe usted lo que luego pasa?

Que anda usted regalando "piedras" a la oposición para que sigan "lapidándole" políticamente hablando, y usted no tiene más que mirarse en el espejo de las intenciones de voto del personal, que no está la cosa como para darse gratuitas alegrías.

Como tiene el gobierno el asunto de las urnas para dentro de año y medio, "todo lo que no sea sumar será restar". No puede el gobierno cometer ningún tipo de error desde el punto de vista de las urnas. Y la visita del otro día a Afganistán, bien podría haberse hecho dos días antes o dos días después. Con eso, Dios me libre, no insinúo que tuviera que estar usted tirando de la cuerda del botafumeiro, ni andar con una cachava (1) con la concha de una vieira colgando, pero hombre, un poco de vista, unos gramos de empatía en lo que se dice trabajarse el voto para no lastrar más el futuro electoral socialista porque sepa, además, que el año próximo en agosto, con la ayuda de Dios, el santo padre vendrá a Madrid. ¿Y qué hará usted? No me diga que tendrá otra urgencia fuera de España que atender. Fíjese que incluso, junto a Benedicto XVI se ha podido ver a un tal Carod Rovira y sin ponerse como hizo en Jerusalén, una corona de espinas. Sabía que tenía que estar donde estuvo el Papa y estuvo, y nadie de quien le vota se lo ha censurado y menos la oposición. Algunos de los que siempre gustan de juntar "las churras con las merinas" han dicho que el Papa se "pasó unos cuantos pueblos" con lo del "laicismo y el secularismo fuerte y agresivo, como en los años 30". No fueron unas palabras afortunadas, sin duda, pero nada tiene que ver con que Zapatero se fuera a Kabul. A veces, los excesos verbales perjudican al personaje, como cuando recién iniciado el pontificado pudo sentirse molesto algún sector musulmán con algunas palabras de un discurso del Papa. No creo que en aquella, ni en esta ocasión, tuviera el Papa ninguna intención de molestar a nadie.

(•) Cachava: Juego de niños que consiste en meter una pelota en un hoyuelo abierto en la tierra empujándola con un palo. Palo que se usa para este juego. Cayado, palo o bastón.