TW
0

El Estado ha reducido a la mitad la aportación económica al Ayuntamiento de Ciutadella, unos 2,3 millones de euros anuales menos en los próximos tres años. Eso se suma a la previsión de déficit que ya era de unos 4 millones de euros. La situación es tan crítica que el alcalde, José María de Sintas, provocó ayer una reunión de urgencia en Palma, con el presidente Bauzá y el vicepresidente Aguiló, y llamó al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Quizás se puedan adoptar algunas medidas financieras para paliar unas consecuencias demoledoras, sin embargo la necesidad de aplicar nuevos recortes del gasto y de incrementar los ingresos se considera inevitable. La subida del IBI del 10 por ciento es una opción, pero es evidente que no es una buena propuesta, porque perjudicará a familias que sufren la precariedad de su economía. El equipo de Gobierno tiene el loable objetivo de no reducir la plantilla, aunque no es seguro que lo pueda conseguir. Al alcalde José María de Sintas le honra haber pedido disculpas por los errores que cometió el gobierno del PP de Llorenç Brondo. Las personas que ocupan los cargos cambian, pero los partidos siguen siendo responsables. También en la oposición. Ahora todos los partidos deben alcanzar un acuerdo imprescindible.