TW
0

El Ayuntamiento de Maó anunció ayer el inicio del expediente de distinción al empresario Pedro Montañés Villalonga (1907-1996) como Menorquín Ilustre, una iniciativa que cuenta con el respaldo de todos los grupos políticos. Sin duda, un merecido reconocimiento a un personaje clave en el mundo empresarial insular, ejemplo para las nuevas generaciones de espíritu emprendedor e innovador. Fruto de su trabajo, esfuerzo y empeño fundó El Caserío, la primera fábrica española de queso fundido que logró situarse en primer lugar del mercado nacional, lo que supuso un gran impulso a la industria agroalimentaria y para el sector primario. Se da la circunstancia de que este mismo año, y en el marco de la feria Innovem, la asociación Joves Empresaris de Balears quiso también premiar su trayectoria poniéndolo como modelo a seguir. A base de ingenio, Montañés, consiguió desarrollar un proyecto modélico tanto a nivel productivo como comercializador. En estos momentos de crisis, es un acierto recordar a los empresarios menorquines que dieron un paso adelante para superar las dificultades de su tiempo y contribuir al progreso de la Isla. Pedro Montañés fue uno de ellos, por lo que la distinción es todo un acierto.