PERE MOLL QUIERE HABLAR CON ARMENGOL. El alcalde de Es Migjorn no tiene intención de dimitir. Ahora que Vicenç Tur ya ya no está al frente del PSOE menorquín, quiere hablar directamente con la secretaría general del PSIB-PSOE y presidenta del Govern, Francina Armengol, porque la gestora insular no le escucha.

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Los hoteleros de Menorca han empezado a calcular, mediante un software de análisis de big data, cuántas plazas ofrece hoy la multinacional Airbnb en la Isla. La cifra, cuando se dé a conocer, sorprenderá a todos. La asociación Terraferida ya ha realizado este cálculo en Mallorca, y sus conclusiones son que Airbnb cuenta con 11.271 alojamientos -ninguno con licencia turística- con capacidad para 78.543 plazas que en 2015 sumaron 550.283 estancias.

Los datos han sido extraídos del portal Inside-Airbnb, de Estados Unidos. Aún cuando estos datos han crecido exponencialmente durante el 2016, la mayor parte de la oferta se concentra en viviendas aisladas y apartamentos (9.689), mientras que las casas con habitaciones privadas para turistas suman 1.556. Los denominados bed&breakfast suponen sólo el dos por ciento de los alojamientos de Airbnb en Mallorca. Jaume Adrover, portavoz de Terraferida, manifestó ayer que «todo se alquila», porque, además de casas y apartamentos, la web oferta once caravanas, nueve castillos, 37 barcos, trece tiendas de campaña, tres cuevas, una barraca, una cabaña en un árbol... y un iglú junto al bosque de Bellver.

PERE MOLL QUIERE HABLAR CON ARMENGOL. El alcalde de Es Migjorn no tiene intención de dimitir. Ahora que Vicenç Tur ya ya no está al frente del PSOE menorquín, quiere hablar directamente con la secretaría general del PSIB-PSOE y presidenta del Govern, Francina Armengol, porque la gestora insular no le escucha.

Habrá que estar atentos a la próxima asamblea general de la Asociación Hotelera de Menorca. La junta de gobierno que preside Luis Casals pondrá sobre la mesa el impacto del alquiler turístico vacacional, las nuevas tipologías de estación turística, la promoción específica y propia para Menorca, y la modernización de los estatutos de la asociación.

La ley encallada

El proyecto para la nueva Ley de Vivienda de Balears, presentado en noviembre por Marc Pons, ha quedado encallado. En primer lugar, porque no cumple las expectativas de Podemos, el aliado incómodo, pero necesario para el PSOE y Més. Al carecer del apoyo de Podemos, tal como ha advertido Alberto Jarabo, no avanza su tramitación parlamentaria.

La Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) también discrepa con este proyecto legislativo. El bregado conseller Pons utiliza sus hipnóticas artes de prestidigitador para abducir a los podemitas mallorquines e ibicencos. En Menorca, la vicepresidenta Cristina Gómez se ha puesto de perfil. Pero hay un segundo motivo que provoca el atascamiento de esta Ley de Vivienda: los aspectos que entran en contradicción con la legislación estatal, con contenidos que bordean la inconstitucionalidad. Marc Pons invoca la hora bruja para conjurar a Podemos y evitar la zozobra definitiva.

El ministro se enfada

Polifacético e inquieto, José Alcover Llompart (Palma, 1923) ha fallecido esta semana. Tuvo una significada proyección pública en Balears en los últimos años del franquismo al ejercer como procurador en cortes y presidir la Diputación Provincial entre 1970 y 1974.

A través de Nicolás Cotoner, marqués de Móndejar, cerró la cesión de Marivent como residencia estival a los entonces Príncipes de España. Posteriormente, fue el artífice de la venta del Círculo Mallorquín -entidad que presidió entre 1980 y 1985- al Govern balear, que lo dedicó a la sede del Parlament.

Doctor arquitecto por la Universidad de Barcelona, firmó importantes proyectos, entre ellos, en 1968, el hotel Saronga de Cala Galdana, de tres estrellas y 672 plazas, distribuidas en 315 habitaciones dobles y 42 individuales, promovido por la compañía británica Clarksons. Construido en 1969, fue inaugurado en agosto de 1970. La ubicación del Saronga en un paisaje privilegiado, y en primera línea de la mejor playa de Ferreries, suscitó una viva polémica, según explica Alfons Méndez en «Històries del turisme de Menorca. El gran error: l'hotel de cala Galdana». Aquel error frustró la construcción del parador turístico nacional previsto por el ministro de Información y Turismo, Fraga Iribarne, en aquella zona.

En agosto de 1971 Alfredo Sánchez Bella, sucesor de Manuel Fraga en el ministerio, visita Cala Galdana. Según recoge MENORCA «Es Diari, «se entabla animado diálogo entre el Ministro, Gobernador, Autoridades y don Guillermo de Olives sobre las características de determinada construcción que constituye un ejemplo de lo que no se debe hacer en materia de construcción hotelera». Según testigos presenciales de aquella conversación el ministro Sánchez Bella inquirió, severo:

-«¿Y quién ha sido el autor de este mamotreto sobre la playa?»

Tras unos minutos de denso y tenso silencio, se escuchó, apenas imperceptible, la voz lejana del presidente de la Diputación Provincial, que formaba parte del séquito de autoridades.

-«He sido yo, señor ministro, que he diseñado este hotel.

-Hombre, Pepe, pues haberlo puesto en otro lugar, que aquí, la verdad, se nota demasiado», zanjó el ministro de Información y Turismo.

A pesar de que las obras del parador turístico nacional se habían adjudicado a Huarte y Cía, el expediente fue anulado por el ministerio y aquel centro nunca llegó a construirse.

PREGUNTAS DE LA SEMANA

¿Cuándo -y adónde- serán trasladados los lodos tóxicos y contaminantes de la antigua depuradora de Ferreries?

¿Qué medidas aplicará la dirección general de Aviación Civil para evitar el fraude en el descuento de residente en los viajes en grupo?

¿Qué novedades han previsto Rafael Duran y Simón Gornés para la nueva gestión turística y cultural de La Mola?

¿Darán comienzo en mayo las obras de mejora del tramo Ciutadella-Ferreries, como ha anunciado el Consell?

¿Qué cambios valora introducir el PSOE en el segundo nivel del Consell tras el relevo Maite Salord-Susana Mora en la presidencia del Consell?