Autobuses. A la espera de turistas en el Aeropuerto de Menorca - Archivo

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Los sindicatos mayoritarios del transporte discrecional de Balears, UGT y Comisiones Obreras (CCOO), acordaron ayer convocar una huelga el 21 y el 22 de julio, mientras que el sindicato USO plantea que se lleve a cabo el 27 y el 28 de julio y el Sindicato Independiente tendrá que ratificar el citado acuerdo en una asamblea que celebrará el próximo lunes, si bien en un primer momento acepta las citadas fechas. Así lo informó el secretario de Acción Sindical de la Federación de Transportes de UGT, Javier Marín, quien manifestó que, en un primer momento, los cuatro sindicatos han estado de acuerdo en convocar la huelga para el 21 y el 22 de julio, si bien USO decidirá también el lunes si se suma al paro en esos días o si lo convoca a final de mes en solitario.

Con independencia de lo que decida USO y el Sindicato Independiente del Transporte Discrecional, Marín ya anunció que el próximo martes UGT y CCOO comunicarán oficialmente al Govern la convocatoria de huelga para el 21 y el 22 de julio a la que estarán llamados un total de 2.400 trabajadores de Balears, de los que el 80 por ciento son fijos discontinuos.

En un primer momento, según reveló, UGT y CCOO también habían planteado que la huelga se llevara a cabo, además, el 20 de julio, coincidiendo con la huelga en el sector de la hostelería, si bien finalmente, se ha desechado esta propuesta, al considerar que eran demasiados días. Marín recordó que el motivo de la huelga es la negativa de la patronal del transporte discrecional a mantener el complemento de antigüedad en el convenio colectivo, lo que, según censuró, provocará que los trabajadores pierdan entre un 17 y un 21 por ciento de su poder adquisitivo en un plazo de diez años. Éste es el "último escollo" en la negociación con la patronal del transporte discrecional, después de que en los últimos meses, se hayan resuelto entre siete y ocho puntos en los que había discrepancias.
sentido común

La Agrupación de Transporte Discrecional tildó de "barbaridad" las diferentes huelgas previstas en este sector para julio y pidió a los sindicatos "sentido común" y una rectificación, según declaró su presidente, Rafael Roig.

El presidente de la patronal consideró que estas huelgas "a la larga" resultarán negativas para los sindicatos. "Se darán cuenta cuando las empresas cierren", dijo para alertar de las graves consecuencias que tendrán, en su opinión, estas jornadas de protesta para la economía balear. "Esta gente no piensa que vive del turismo", criticó Roig a los sindicatos, quien auguró que cuando se arrepientan "puede ser tarde". "Las empresas están pasándolo muy mal, hay que tener sentido común", recalcó.