Tener un piano de conciertos es una necesidad para cualquier sala. Por ejemplo, en el Teatre Principal de Maó cuentan con dos, un Yamaha de media cola y un Steinway & Sons (en la imagen) de cola larga | RTVE

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El Ayuntamiento de Sant Lluís prevé destinar un máximo de 59.709 euros para la compra de un piano para conciertos para la Sala Polivalent Albert Camus, una inversión que la edil del grupo municipal del PP, María Dolores Tronch, considera que no es «ni lógica ni ética», puesto que se «pretende gastar 59.000 € en la compra de uno de los mejores pianos del mundo (...) no para la Ópera Estatal de Viena ni para el Gran Teatre del Liceu», sino para la sala local.

Los populares acusan al equipo de gobierno de no priorizar necesidades. «Con la cantidad presupuestada podrían encontrar pianos de calidades excelentes» y «haber utilizado la convocatoria para nutrir nuestra Escuela d'Ensenyaments Artístics con más instrumentos», recriminan, a la par que reprochan que den «lecciones de ética».

El concejal de Cultura, Antoni Garcia, recordaba este martes que «el piano que tenemos tiene 30 años, se ha trasladado mucho, se ha almacenado mal y en verano ya nos advirtieron que cualquier pianista puede negarse a tocarlo porque está mal, que ya no aguanta obras de Chopin o Schubert». Asimismo, apuntó que «un piano como el nuestro vale 30.000 euros, e hicimos el esfuerzo de presupuestar esa cantidad». Así, el resto hasta los 59.709 euros llegaría de «las ayudas del Consell para la dotación de equipamientos culturales», y la compra se haría, por imperativo legal, por concurso público, lo que convierte el importe en precio de salida para el que «esperamos rebajas».

Sobre el coste excesivo, Garcia ironizó sobre el desconocimiento de los populares. «Si con 60.000 euros logramos un piano como el del Liceu, es que lo hacemos muy bien, porque ese vale 160.000 euros», comparó, y aseguró que «nos hemos informado con pianistas de renombre», como Marco Mezquida o Kiev Portella entre otros, que apuntaron que para la sala es suficiente con un piano de tres cuartos de cola. «Yo no entiendo de pianos, me dejo aconsejar por expertos. Lo que no haremos es lanzarnos a la piscina con un piano de mala calidad». Además, Garcia recomendó al PP que «se informe» antes de hablar del EMEA. «A la Escuela nunca se le ha dicho que no a cualquier petición, lo que se pide se intenta satisfacer», y concluyó asegurando que «no faltan instrumentos».