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Hemos reiniciado en Menorca el curso político y entre otros movimientos sociales vuelven ciertas protestas contra el proyecto de mejora de la carretera general que une Mahón con Ciutadella. Las críticas se dirigen contra el equipo de Gobierno del Consell Insular y concretamente contra la Conselleria de Movilidad, de la que soy responsable desde el verano de 2011. El voto mayoritario de los menorquines a una opción política representada por el Partido Popular lo permitió. En su programa electoral , dicho partido optaba por el desdoblamiento de la carretera.

Me dirijo a estos menorquines. Bien sé que otros mantendrán posturas inamovibles, que incluso debo respetar. He intentado por todos los medios llegar a ellos, pero bien por pura estrategia de acoso y derribo, bien por reacciones viscerales contra una opción diferente a la suya, bien por apuntarse a cualquier bombardeo o simplemente por haber perdido sustanciosas subvenciones, siguen activos.

Digo que soy responsable del trabajo de un buen grupo de técnicos y funcionarios. No el autor del diseño. No soy ingeniero, ni experto en carreteras como bien saben. Pero sí he consultado exhaustivamente con muchos de ellos –Mariano Cañas del Ministerio de Fomento, Gabriel Le Senne, Carlos Jover, Pau Socías- recabando su criterio y opinión.

He actuado con la misma sensatez y cariño a Menorca con que ayudé a gestionar, siendo jefe de gabinete de un excelente Ministro de Defensa -Eduardo Serra- la formación del Consorcio de La Mola y San Felipe, cuando ayudé a un buen alcalde de Mercadal a conseguir sus cuarteles, o cuando me comprometí con un grupo de leales amigos a recuperar el Hospital de la Isla del Rey.

Y hemos demostrado ser sensatos al ejecutar las obras de la carretera que une Mahón con el Aeropuerto de Menorca, priorizando el diseño de un carril peatonal-bicicletas a la tentación de un desdoblamiento. Pronto comprobarán como se ejecuta con los mismos cánones el Camí de Torralba.

Permítanme que recuerde ciertos datos y fechas relacionados con la carretera general:

1. Los fondos para la mejora de esta carretera proceden del Ministerio de Fomento, por un buen convenio firmado con el Consell Insular en 2007. El Convenio es finalista. No cabe como dicen profetas foráneos, desviar sus fondos a otras necesidades.

2. Una Comisión Mixta Fomento-Consell, regula la transferencia de fondos y las condiciones de ejecución.

3. El tramo Mahón-Alayor debía haberse ejecutado en 2010. Cuando en la próxima Comisión Mixta informe que aún no han empezado las obras, escucharé una misma recomendación: "No tienen ustedes capacidad jurídica y administrativa para ejecutar estos proyectos".

4. A día de hoy el Ministerio lleva anticipados 19 millones de euros.

5. Cité antes que el programa del Partido Popular, preveía el desdoblamiento de la carretera. En un claro ejercicio de realismo político el equipo de Gobierno del Consell aceptó como alternativa el trazado que se va a ejecutar. Los tiempos son diferentes debido a la crisis económica y conviene tener los pies en el suelo. Lo posible y lo deseable como repito.

6. Este equipo de Gobierno no diseñó la Variante de Ferreríes. Finalizó el proyecto en plazo, ceñido estrictamente al contrato con la empresa constructora. Cualquier variación hubiera supuesto un coste adicional. Pero comprobarán -en claro ejemplo de cinismo político- como la variante no recibió críticas de ningún colectivo social.

7. No es cierto que el ingeniero que desarrolla el proyecto Mahón-Alayor sea el mismo que diseñó la variante. Fue solo el director de la obra contratado por el anterior equipo del Consell.

8. Cualquier comparación entre el diseño de la variante y lo que ahora se quiere hacer, no es exactamente cierta. El modelo que se sigue está más próximo a la solución que en su día se dio a la variante de Alayor. No se penaliza la velocidad de transito, y permite el paso inferior de dos cruces como son los de Torralba y Son Bou.

9. No se pueden apoyar estudios solo en siniestralidades pasadas, que las ha habido y tristes. Una administración debe trabajar para evitar siniestros futuros, es decir debe priorizar seguridad incluso sobre la comodidad. Por supuesto hay que preservar el territorio, pero por encima hay que preservar a las personas. La Comisión Balear de Medio Ambiente ha sido estricta en la aplicación de normas ambientales.

Se está procediendo estos días a responder a todas las alegaciones presentadas. Se esperó el dictamen de la Comisión Balear de Medio Ambiente para hacerlo. Muchas sugerencias han sido recogidas y la Conselleria agradece lo colaboración de entidades y ciudadanos. Por supuesto sé que es difícil contentar a todo el mundo. Somos una sociedad rica en criterios e incluso, entiendo, es positiva cierta confrontación de ideas, siempre y cuando se apoyen en criterios objetivos.

Es solo cuestión de confianza.