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Las cuatro formaciones con representación en el Consell d’Eivissa: PP, PSOE,    Unidas Podemos y Ciudadanos movieron ficha para que Eivissa incremente su representación en el Parlament.

Al avalar el informe jurídico encargado por la propia institución política ibicenca a Josep Maria Castellà, doctor en Derecho Constitucional, ponen sobre la mesa una reclamación que inquieta en aquella isla.

Como manifestó el presidente del Consell d’Eivissa y diputado regional, Vicent Marí, «existe una situación de desventaja para la representatividad y el peso político de la isla de Eivissa en el conjunto de la comunidad, por lo que hay acabar con la discriminación del número de diputados de Eivissa en el Parlament».

El actual reparto de los 59 escaños de la Cámara autonómica atribuye 33 diputados a Mallorca, trece a Menorca, doce a Eivissa y uno a Formentera. Es el fruto del acuerdo alcanzado en la ‘Comissió dels Onze’ durante la redacción del Estatut, aprobado finalmente en 1983 cuando Menorca y Eivissa exigieron la paridad en la composición del Parlament y la subsidiariedad en la gestión de las competencias. La Ley de Régimen Electoral de 1986 confirmó la distribución, que fue avalada por el Tribunal Constitucional en 1992.

Pero en estos treinta años, proclaman los partidos políticos de la Pitiusa mayor, han cambiado las cosas. Invocan el informe del doctor Castellà: «con 147.914 habitantes, Eivissa cuenta con doce diputados, lo que deja la isla en infrarrepresentación, con un diputado por cada 12.236 habitantes, mientras que Menorca tiene un diputado por cada 7.184 habitantes».

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Este melón se abrirá después de las elecciones autonómicas de mayo de 2023. Para modificar la actual composición del Parlament será necesario un amplio pacto político. Nadie sabe cuál será el resultado final, con el riesgo de una maniobra mallorquina por aquello de que ‘nosotros somos más’, que puede perjudicar a menorquines e ibicencos.

Al avalar el informe jurídico encargado por la propia institución política ibicenca a Josep Maria Castellà, doctor en Derecho Constitucional, ponen sobre la mesa una reclamación que inquieta en aquella isla.

Como manifestó el presidente del Consell d’Eivissa y diputado regional, Vicent Marí, «existe una situación de desventaja para la representatividad y el peso político de la isla de Eivissa en el conjunto de la comunidad, por lo que hay acabar con la discriminación del número de diputados de Eivissa en el Parlament».

El actual reparto de los 59 escaños de la Cámara autonómica atribuye 33 diputados a Mallorca, trece a Menorca, doce a Eivissa y uno a Formentera. Es el fruto del acuerdo alcanzado en la ‘Comissió dels Onze’ durante la redacción del Estatut, aprobado finalmente en 1983 cuando Menorca y Eivissa exigieron la paridad en la composición del Parlament y la subsidiariedad en la gestión de las competencias. La Ley de Régimen Electoral de 1986 confirmó la distribución, que fue avalada por el Tribunal Constitucional en 1992.

Pero en estos treinta años, proclaman los partidos políticos de la Pitiusa mayor, han cambiado las cosas. Invocan el informe del doctor Castellà: «con 147.914 habitantes, Eivissa cuenta con doce diputados, lo que deja la isla en infrarrepresentación, con un diputado por cada 12.236 habitantes, mientras que Menorca tiene un diputado por cada 7.184 habitantes».

Este melón se abrirá después de las elecciones autonómicas de mayo de 2023. Para modificar la actual composición del Parlament será necesario un amplio pacto político. Nadie sabe cuál será el resultado final, con el riesgo de una maniobra mallorquina por aquello de que ‘nosotros somos más’, que puede perjudicar a menorquines e ibicencos.